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Publicado por PortalFrutícola

Las nuevas variedades de cerezas y el comportamiento de las clásicas, fue uno de los principales temas abordados en la primera edición de Cherry Tech, evento organizado por Yentzen Group y SmartCherry, instancia donde el asesor experto en cerezas, Walter Masman presentó una radiografía actual de la industria chilena y los pasos a seguir los próximos años para mantener el éxito del negocio.

Masman indicó que Chile posee un liderazgo indiscutido en el cultivo de cerezas, donde en el hemisferio sur posee una participación de un 97%, “por lejos somos el actor relevante y el resto de los países productores son Argentina, Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica. Si multiplicamos la sumatoria de lo que hacen y lo multiplicamos por 32, recién ahí nos hacen el peso”.

El experto agregó que el desarrollo de la industria ha tenido un crecimiento exponencial los últimos 22 años, lo que se refleja en las casi 62 mil hectáreas plantadas, siendo las regiones más importantes de O’Higgins y Maule.

Dado el crecimiento y éxito de la industria, el asesor entregó una proyección respecto a los volúmenes que se pueden obtener el año 2025 -2026, precisando que “probablemente tengamos un peack de volumen. Este año será un año un poco bisagra, dado los buenos resultados de la temporada pasada, y se está observando el ánimo de querer plantar”.

¿Cuál es el siguiente paso?

A juicio de Walter Masman, es necesario que la industria de cerezas chilenas pueda analizar lo sucedido con otras especies que han gozado de buena productividad y rentabilidad, como es el caso de la uva, donde a partir del año 2015 comenzó a existir una baja en el volumen de forma sustantiva.

Otro de los ejemplos que indicó el asesor es el caso de los arándanos, situación donde se comenzaron a dar bajas en el volumen, y “donde la industria ha tenido que generar un cambio en las variedades, debido a las exigencias de los mercados desde el punto de vista de firmeza, sabor y calibre”.

¿Qué está buscando la industria de las cerezas?

Masman señaló que la industria busca buena apariencia, excelente cualidades interna, firmeza, color rojo caoba idealmente, sin daño mecánico, sin pudriciones, pedicelos verdes, buen sabor, equilibrio dulce – acidez, color de pulpa homogéneo. Y las exigencias en los mercados son cada vez mayores.



Para conocer el análisis de las actuales variedades, Walter Masman invitó a un grupo de expertos, entre ellos Sandra Barría, gerente de calidad de la exportadora Giddings; Pamela Osorio, gerente de calidad y de desarrollo sustentable de Ranco Cherry; Jessica Rodríguez, asesora en postcosecha; y a Raúl Orellana, gerente técnico de Quelen Export; quienes evaluaron las 11 variedades que lideran el negocio de las cerezas en Chile.

Brooks: posee buen calibre, época de cosecha temprana. Lo malo, es susceptible a partidura y toma de color. Los expertos coincidieron en que reemplazarían a la variedad.

Royal Down: lo bueno, el calibre y es temprana. Lo malo, la vida postcosecha muy acotada y es susceptible a partidura. Los expertos coincidieron en que reemplazarían a la variedad.

Frisco: lo bueno, el calibre. Lo malo, fruta blanda y susceptibilidad a machucones. Los expertos coincidieron en que reemplazarían a la variedad.

Santina: buen sabor, llega bien a destino y le gusta al consumidor chino. Lo malo, exigencia de color en cosecha y le cuesta tomar sólidos solubles. Los expertos no reemplazarían a la variedad.

Bing: lo bueno, la vida postcosecha, el sabor y que le gusta al consumidor chino. Lo malo, bajo calibre, baja productividad.

Rainier: lo bueno, el color, calibre y sabor. Lo malo, no resiste el paso pro la línea, alta susceptibilidad al manchado. Tres de los expertos cambiarían esta variedad y uno la mantiene.

Lapins: lo bueno, es productiva y tiene una buena vida postcosecha. Lo malo, piel de lagarto, sabor plano en destino. Dos de los expertos la reemplazarían.

Kordia: buen sabor y postcosecha. Lo malo, se maneja como polinizante, por lo que el potencial real no está muy claro. Los expertos no reemplazarían a la variedad.

Skeena: buen calibre. Lo malo, susceptible a partidura, pardeamiento interno. Todos los expertos reemplazarían esta variedad.

Regina: lo bueno, es resistente al daño mecánico, buena firmeza. Lo malo, la vida postcosecha, mal sabor y sabor herbáceo. Tres de los expertos la reemplazarían.

Sweet Heart: lo bueno, calibre, productividad. Lo malo, baja elasticidad en la piel. Los expertos la reemplazarían.

Masman indicó que, a juicio de los expertos, 5de las 11 variedades encuestadas serían reemplazadas. “El 45% de lo que hoy día tenemos, sería reemplazado y eso comienza a generar ruido. Es propio de todo negocio exitoso, el querer mejorar”.

¿Chile se encuentra preparado para el recambio varietal?

Masman explicó que actualmente existen 13 programas genéticos, de los cuales dos están en retirada porque esas variedades no dieron el ancho y los 11 restantes se encuentran vigentes en Chile.

Añadió que el abanico de variedades es muy amplio, por lo que la industria debe estar atenta a los que se viene. “En Chile, Biofrutales está haciendo un programa de mejoramiento continuo con la selección 21, es una variedad bicolor, con características mejoradas de Reinier y que probablemente se comercialice la próxima temporada”.

El experto agregó que se podrían producir cerezas con sello de origen en la zona norte y en la zona sur de Chile, para darle características distintas.

Respecto al recambio varietal, Masman puso sobre la mesa un tema relevante vinculado a la flexibilización de las cláusulas de royalty,  “compartamos el éxito y también los fracasos. Coloquémonos en la situación del productor, ya que tiene que existir un compromiso del programa genético con crear variedades con potencial, probablemente acotando volúmenes para que esto en algún momento no rebalse”.

El asesor hizo un llamado a los viveros a tener el compromiso de desarrollar una buena planta. “Indudablemente también es importante el compromiso del productor a seguir los manejos. Son pocos los que hoy asumen los reales compromisos y responsabilidad de tener un programa genético, porque uno le puede decir a los productores lo que crece y se desarrolla, pero ellos deciden lo que se planta” dijo Masman.

Nuevas variedades de cerezas

Respecto a las nuevas variedades que se están implementando en el mundo y en Chile, Masman mencionó que estas poseen alto vigor, de buenos calibres y fenologías aceleradas. “Pero cuando están creciendo las nuevas variedades, vemos manifestación de estrías y rompimiento, por lo que van a ser más susceptibles a enfermedades. Con un nivel de vigor explosivo, que implica poder regular la expresión vegetativa y poder colocar en sistema de conducción adecuada”.

Un ejemplo que presentó fue Nimba, que posee un potencial de calibre de 30 a 32 milímetros, días de floración a cosecha de 55 días y pueden ser menos. Ariana posee un potencial de 28 a 30 milímetros, con 60 días y menos también. Santina, 26 a 28 milímetros y Lapins de 28 a 30 milímetros.

Indicó que, dado el desarrollo tan acelerado en términos de crecimiento, es necesario manejar todos los niveles adecuados cuando parte la división celular.

Diagnóstico

Para Masman, Chile seguirá creciendo en superficie y volumen de acuerdo con los resultados obtenidos. “Al parecer existe necesidad de recambio de algunas variedades. Probablemente estamos en el punto de inflexión de poder realizar cambios en la toma de decisiones, el éxito dependerá del grado de información y responsabilidad que asuma cada uno de los agentes”.

Agregó que Chile es hoy el país con la mayor oferta genética, lo que involucra mayores desafíos, compromisos y trabajo mancomunado de toda la industria.

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